Me envió un mensaje a mitad de la noche y yo sabía que era el momento de ir con ella. Había sido un día difícil y estaba por terminar con todos los preparativos de mi viaje a New York, tal vez no volvería a casa y comenzaría una nueva vida, si es que la vida se puede comenzar cada que uno lo desea. Me dijo que andaba desnuda y que recién terminaba su quehacer, que sus horarios se habían complicado, que de noche le costaba trabajo dormir y que tenía ganas de comerse un pastel. Yo tenía ganas de ella, pero decidí no salir, las cosas en las calles estaban muy feas, y de salir, estaría tentando a mi suerte y tal vez me lo lamentaría o ni siquiera eso. Así que fui desviando la plática, tan lejos como fuera posible, no deseaba hablarle de New York, ni de Udele, ni del gato que amaneció muerto en la puerta de la casa y mucho menos quería decirle que alguien con la sangre pesada, había colgado de los cables de la luz un pájaro, tal y como algunos cuelgan los tenis, lo habían aventado con una cuerda que en el otro extremo tenía una pequeña piedra. No le pude contar gran cosa, y solo le hable de mi maldito reflujo y de las ganas que tengo de hacer tantas cosas y de lo viejo que me estoy poniendo, después cerré el celular e intente dormir, desde luego que como todas las noche, no lo logre.
Mensajes a mitad de la noche
abril 24, 2015 por Carlos Efron Mur
Publicado en A la hora de amar, Birdman, Después del sexo, Historias de a pie, Historias sin fin, Las apariencias engañan, Lo demás es silencio, NaPoWriMo, poemas, poesía, RELATOS | Etiquetado AMANTES, balacera en matamoros, confesiones, crimen organizado, cuando ya nada importe, Después del sexo, Esta fuga de mi mismo, esto no lo cuentes, Mensajes a mitad de la noche | 4 comentarios
4 respuestas
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
-
Entradas recientes
-
Únete a otros 3.215 suscriptores
Comentarios recientes
Después de hacer el amor se escribe
EL MUNDO COMO LO CONOCEMOS
Para leer después de hacer el amor
Meta
Actualizaciones de Twitter
Archivos
- enero 2020 (11)
- diciembre 2019 (1)
- enero 2018 (5)
- julio 2017 (1)
- mayo 2017 (9)
- marzo 2017 (19)
- febrero 2017 (4)
- enero 2017 (12)
- diciembre 2016 (13)
- noviembre 2016 (2)
- octubre 2016 (19)
- septiembre 2016 (7)
- agosto 2016 (12)
- julio 2016 (6)
- junio 2016 (30)
- mayo 2016 (20)
- abril 2016 (25)
- marzo 2016 (24)
- febrero 2016 (29)
- enero 2016 (26)
- diciembre 2015 (16)
- noviembre 2015 (25)
- octubre 2015 (24)
- septiembre 2015 (27)
- agosto 2015 (29)
- julio 2015 (4)
- junio 2015 (6)
- mayo 2015 (32)
- abril 2015 (30)
- marzo 2015 (33)
- febrero 2015 (29)
- enero 2015 (33)
- diciembre 2014 (13)
- noviembre 2014 (29)
- octubre 2014 (19)
- septiembre 2014 (24)
- agosto 2014 (32)
- julio 2014 (29)
- junio 2014 (34)
- mayo 2014 (32)
- abril 2014 (31)
- marzo 2014 (32)
- febrero 2014 (27)
- enero 2014 (31)
- diciembre 2013 (18)
- noviembre 2013 (7)
- octubre 2013 (8)
- septiembre 2013 (8)
- agosto 2013 (14)
- julio 2013 (9)
- junio 2013 (13)
- mayo 2013 (29)
- abril 2013 (52)
- marzo 2013 (39)
- febrero 2013 (37)
- enero 2013 (43)
- diciembre 2012 (15)
- noviembre 2012 (11)
- octubre 2012 (2)
- septiembre 2012 (8)
- agosto 2012 (13)
- julio 2012 (11)
- junio 2012 (17)
- mayo 2012 (18)
- abril 2012 (18)
- marzo 2012 (34)
- febrero 2012 (47)
- enero 2012 (48)
- diciembre 2011 (53)
- noviembre 2011 (51)
- octubre 2011 (42)
- septiembre 2011 (40)
- agosto 2011 (39)
- julio 2011 (42)
- junio 2011 (36)
- mayo 2011 (38)
- abril 2011 (51)
- marzo 2011 (41)
- febrero 2011 (33)
- enero 2011 (40)
- diciembre 2010 (19)
- noviembre 2010 (26)
- octubre 2010 (10)
- septiembre 2010 (12)
- agosto 2010 (31)
- julio 2010 (15)
- junio 2010 (14)
- mayo 2010 (30)
- abril 2010 (31)
- marzo 2010 (27)
Páginas
- Follow Despues del sexo Blog on WordPress.com
Mañana lo lograrás… Seguro. 🙂 … Inquietante inquietud
seguro que un día de estos lo logro, abrazos querida
Ummm yo hubiera aceptado el reto y el riesgo… Muaks
me dormí por decirlo de manera elegante
besos querida