yo se que aún nos falta tiempo,
que lo nuestro solo puede retardarse aún más,
que la muerte seguirá rondando estas calles,
que el cambio de poder nos traerá esperanzas,
desgracias muertes, y también
sueños imposibles,
ayunos,
usura, con tasas de interés impagables,
sudor,
dolor,
desgracias;
el adulterio es tardado
tus pies desnudos
jamás llegan
a nuestro espacio reservado,
entonces me entra el rencor, y
te digo al oído
que feos pies tienes,
lo hago,
lentamente,
y te produzco
un extraño dolor,
pero te desquitas y
me dices:
que el remedio
esta entre tu sexo
a la una de la mañana
cuando el gallo aún no se despierta
y el elefante
sufre una demanda de su esfínter,
me jodes
siempre lo haces
sé que faltan muchos días
que la ceguera no se cura
con un candidato
ni con demandas de justicia
que no basta con disparar un arma
o legalizar el consumo de la droga
y desesperamos o mejor aún
desespero
y me arranco el silencio
y te digo al oído,
que hermosa piernas tienes
mientras que el candidato cuida
su horrendo peinado
y otro más nos regala
su amor hasta el hastío
quizá un día, cansado de esta espera
me mude a tu seno
para dejar de ser hombre
y convertirme en silencio,
convertirme en tu sudor, en tu pezón
en tu piel irritada, en una carga
en hormiga que migre
de un lugar a otro
de esa geografía,
en una hormiga
capaz de cargar con todas
tus penas;
tengo que impedir que nos maten;
votar, ¿desde cuándo es la solución?,
ese día aún no llega;
tengo que impedir que nos maten,
asegurarnos, porque la vida
es cruel, y nos arranca
y nos despedaza;
los sueños contra el sistema y
contra todo lo que nos haga
rebeldes, nos cansa
y nos espanta
pero no queremos
estar bajo tierra;
entonces,
llega ese día
te quitas la ropa
abrimos los brazos
y la pasión suele correr,
nos guardamos en el silencio
en las noches en vela,
en el milagro de las calles,
nos guardamos de la muerte
ambulante
del sexo con pago
del sexo obligado
de la asfixia de no tenernos
de esta espera interminable
de las palabras simples
de tu voz que nos dice y me dice:
aún no, no es el tiempo esperado;
la usura
el poder
tu sexo
y mi boca
que repite tu nombre
una vez y otra: Esperanza;
esperanza, llego la hora
Otro orden en su modo y espacio, en la asistencia de otros tiempos y modos que ponen desesperanza, terror y apenas inclinan a encontrar esperaza de vida, de entenimiento de lo menor por caso. Luce la obra desazon y clama en el desiero por un oasis sin encuentro ni recompensa, porque falta demasiado que colme. Es el tema y se atiende.
Pero hay humanidad y fuerza, ahí, en el verso y sus palabras. Largo es tu aliento y valor te deseo.
Con cordialidad hermana, mi abrazo y hasta una mejor esperanza.
es un mundo extraño, donde piensas en la pasión y el bombardeo político te desbarata, es como estar pensando en el amor y no dejar de ver el rostro de cuanto candidato y escribes pero esas imágenes no salen de tu mente y eso cansa y el ritmo d el anti ritmo de ese intento poético es así cansado porque es lo que habita en nuestras cabezas últimamente…
Perfecto logrado. Tu poesía es compleja, muy emocional y directa, muy del momento de muestros años de ahora, testimonial seguramente. Este pema, pues, sí, noción y valor del ritmo-contraritmo.
Pues sí, Carlos, pues que sí.
muchas gracias compadre, gracias por el aliento y el impulso otorgado
Siempre me impresiona la tenacidad en tu temática, tan sólidamente tuya. Hoy, sin embargo, me ha tocado profundo, especialmente cuando hablas ya sin rodeos y sin melodramas de la palabra «adulterio». Esa palabra tan cruel para las dos (o las tres) partes involucradas en uno de estos enlaces débiles, cadenas hechas no de hierro, sino de hojalata. Esos instantes de los que hablas, francamente diré, creo que no nos hacen realmente olvidar toda la cruda y dura realidad. A veces la empeoran, te añaden una carga emocional más… y el remordimiento. Que estés bien hoy y todos los días.
P.D.: Y cuando es a uno al que abandonan por otro hombre es igualmente duro, bien sé de lo que te hablo.
un abrazo querido Julio
compadre me lo estás poniendo difícil, a ti te tocaron más neuronas en el reparto.
no lo creo, eso de las neuronas y de ser así ni las se usar, no hay manual de usuarios, pero podemos proponer otra cosa con eso de no ponerlo difícil…algo que te sea más rutinario por ejemplo
no tiene manual de usuarios, como los coches japoneses, como las mujeres.
No te preocupes por la dificultad, las rutinas ni siquiera sé lo que son, ando siempre de arriba para abajo. seguimos adelante.
me gusta que no tengas rutinas, que de arriba abajo se pierdan todas las intenciones para la existencia de manuales, me gusta que seas mi compadre y sobre todo me gusta como escribes, todo un honor leerte
Descorazonador poema…. pero creo que en algún momento, la desesperación y la esperanza se encontraran, y compartiran un silencio. 🙂
Van en camino a ese encuentro